martes, febrero 05, 2008

UNA NOCHE DE INVIERNO

A mis amigos y compañeros de taller
que tanto ayudan a rehacer poemas.
Aquella noche de invierno
soñé que me habías perdido.

Eres fuerte, ya lo sé,
pero sin mí tu destino
se acompaña de una sombra
que tú moldeas con mimo.
La proteges, la acicalas,
y la cuidas con el mismo
delirio de devoción
que derrochabas conmigo.

Yo quería despertar

pero en invierno las noches
son más largas que los días
por eso seguí soñando,
soñé que yo aparecía
y que tú me reencontrabas
y que no me conocías,
porque tu sombra moldeada
ya no era igual que la mía,

y seguiste tu camino.

Pero al rozarte un instante
se erizaron tus recelos
y vi en la mirada pálida
que recogía tus miedos
el deseo de refugiarse en
un rincón de tus recuerdos.
Yo quería despertar
aquella noche de invierno.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Chus, has traído mis recuerdos
en tus versos. Y los has traído
con palabras tan sencillas y sabias
que me penetran el alma en tantas
noches de invierno que la vida me da.
Muchas gracias, afectuosamente
Manuela